Secure Cloud Communication Services (SCCS) se basa en los servicios de Akamai para empresas y ofrece, además de servicios líderes de cero confianza, otras funciones de seguridad de red, como Secure Web Gateways (SWG), Firewall as a Service (FaaS), Threat Protection Services o cifrado de extremo a extremo. Así SCCS permite lograr una seguridad integral en la nube: se monitorea todo el tráfico de datos, se identifican los ataques de phishing y malware, y se protegen los datos sensibles. Gracias a SCCS, que se basa en un modelo de cero confianza, el uso de servicios en la nube se hace más flexible sin comprometer la seguridad ni el rendimiento. SCCS es la respuesta adecuada para muchos casos de uso, por ejemplo como sustituto de VPNs existentes o para la rápida realización de proyectos de fusiones y adquisiciones.
Secure Cloud Communication Services (SCCS) sustituye o complementa las conexiones de red a nivel de Layer 2, como un Virtual Private Network. Pero, en comparación directa, ofrece un mayor rendimiento. Conforme al modelo de cero confianza se comprueba cada acceso remoto de los usuarios al software de la empresa antes de establecer la conexión, es decir que solo los usuarios autorizados puede autenticarse y usar aplicaciones definidas y autorizadas para ellos. Así se vuelven superfluos los puertos abiertos permanentemente y se protege la red contra las amenazas. Gracias a la red multiredundante de servidores de computación periférica, SCCS tiene una altísima disponibilidad y puede usarse de manera uniforme a nivel mundial.
Para empezar a usar Secure Cloud Communication Services no hace falta hardware ni software. Así que los plazos de entrega no juegan ningún papel importante. Tras una breve implementación se puede poner en servicio la solución digital de seguridad. Aquí se generan casi exclusivamente costos operativos con un modelo de pago por uso. Además, los servicios son escalables prácticamente sin límite, de manera que de una instalación piloto se puede hacer rápidamente una solución para toda la empresa. Asimismo, SCCS reduce drásticamente la complejidad y, por lo tanto, el esfuerzo operativo, al reducir la cantidad de proveedores de soluciones individuales.
Con SCCS se puede controlar y proteger el tráfico de datos de los clientes, socios, proveedores y empleados. El proceso se realiza ad hoc: Los usuarios arrancan una aplicación y en un segundo plano se establece una conexión de internet independiente del proveedor con el servicio EAA. Tras ingresar los datos de inicio de sesión, estos reciben acceso directo a las aplicaciones que están autorizados a usar. Las aplicaciones se hacen compatibles con SCCS por medio de conectores virtuales que se encargan de que estas aplicaciones estén accesibles en internet. Cómo se pueden cerrar los puertos del firewall. Cuando un usuario quiere arrancar una aplicación, se comprueba su autorización y se activa la conexión a la aplicación solo si cuenta con la autorización necesaria.
Con SCCS se puede fijar el cumplimiento de las directrices de datos para cada usuario, independientemente de su ubicación y su terminal. En la plataforma se pueden implementar requisitos legales individuales, ya sean requisitos locales de protección de datos o directrices que prohíban guardar datos en determinados países. Naturalmente, la comunicación se cifra y también se pueden usar otros procedimientos para garantizar una mayor seguridad, como la autenticación multifactor. Además, el acceso es más seguro porque las directrices de uso se definen en función de la identidad. En resumen, cumplimos todos los requisitos de Zero Trust Networking Access (ZTNA).
SCCS se rige por el modelo de Secure Access Service Edge (SASE) como lo acuñó Gartner. Este prevé una respuesta combinada de acceso y seguridad como reacción a la transformación esencial de la TI inducida por la creciente digitalización, sobre todo para los servicios en la nube y del IoT. Antes el mundo era relativamente sencillo: las aplicaciones se ejecutaban en el centro de datos propio y se usaban con conexiones privadas. Pero con el auge de la computación en la nube, ya no tiene mucho sentido aferrarse a este concepto. Enrutar primero a los usuarios por la red interna de la empresa para después remitirlos a servicios y aplicaciones web externos es complejo y trabajoso. SCCS ayuda a evitar las desventajas de la red de retorno (backhaul) y, al mismo tiempo, aumentar la seguridad. Solo los usuarios comprobados pueden acceder a las aplicaciones de la empresa. SCCS es el complemento perfecto para tu estrategia de nube.