Para el reatil, la transformación digital integral supone tanto una oportunidad como un reto. Por un lado, la computación en el cloud abre la posibilidad de desarrollar nuevos modelos de negocio y optimizar los existentes. Por otra parte, la transición al cloud no es una tarea trivial y debe hacerse estar bien pensado, desde el cumplimiento de las directrices de protección de datos y la integración de los sistemas y datos existentes hasta la gestión de los costes.